conference birdsHay momentos en los que uno se propone una acción y se lanza decidido a llevarla a cabo, y bueno… a veces está bien darse cuenta de que es lo que se hace, aceptar que el tiempo tiene sus normas. A mi me acaba de pasar. Me he dicho, tengo que escribir dos post seguidos pues llevo mucho tiempo sin actualizar el blog, pasando por alto que si no la había hecho era por algún motivo, teniendo que asumir que se me negaban las palabras asumiendo la momentánea incapacidad para desatorar el canal. Y por ello no ha de ser raro que teniendo esta carátula en borrador desde hace más de un mes, no hubiera conseguido más que un par de líneas escritas, también hace un mes. Las mismas que acabo de borrar y sobre las que estoy escribiendo ahora mismo. Y las he eliminado porque, mas allá de ser algo de lo que yo pudiera sentirme responsable, parecía una de esas reseñas en Amazon, de la discográfica, o en las revistas especializadas para anunciar un disco o vender un crecepelo, con adjetivos manidos, sin pasión… Entonces me he dicho, si realmente me gusta este disco se merece algo mejor. Al menos ser sincero. Así que si me fallan las palabras y hasta nueva orden, simplemente lo colgaré a modo de declaración de intenciones.

Si diré que es una puerta interesante hacia un tipo de música, el free jazz (también conocido como New thing), en la que cada uno se sumerge a pulmón y llega hasta donde llega. Puede resultar molesta y ruidosa, y es que también está pensada para ser molesta y ruidosa, a veces… aunque no es solo eso, claro. Es pues una música que tiene su razón de ser en los años 60 y que poco tiene que ver con lo que ahora se vive en occidente, pues los valores y los motivos sociales que generaron este movimiento musical han desaparecido por el camino, así que quedará relegada a escucharse en esos momentos que escasean cada vez más en nuestro tiempo, este tiempo de impulsos rápidos e instantáneas satisfacciones, y de satisfacción rápida muy poco se va a encontrar aquí. Requiere de una actitud si cabe más abierta, para que el filtro emocional no se cierre rápidamente, y así poder disfrutar de las nuevas emociones que se plantean, pues es su vocación y esencia mover almas y sacudir espíritus, y también la búsqueda de la libertad creativa y en mi opinión la de crear arte, y ambos objetivos están cumplidos en este disco. Así que si alguien (atrevido) se va a animar con él, pues ahí, mas abajo,  le dejo el link al spotify. Y no olvide ponerse el bañador y tomar aire antes. También advertir que algunas melodías aparentemente complejas tienen algo de pegadizo, y una vez se te pega una melodía de este tipo, no hay vuelta atrás. Yo por mi parte, no puedo sino reconocer el freak que llevo dentro.

Creo que, como en el poema de Benedetti;

«…antes de regresar
a mis lobregos cuarteles de invierno

con los ojos bien secos
por si acaso

miro como te vas adentrando en la niebla
y empiezo a recordarte.
«*

*Mario Benedetti (vaya, se me ha colado aquí, de repente).

Así me despido, pues!

Dave Holland – Conference of the Birds

Trago recomendado: un preparado de absenta, con el terroncito de azúcar y el agua fresquita.